fainá

Fainá

El post de hoy vino inspirado, como pasa muchas veces, por un paquete de harina de garbanzos que caducaba pronto, y buscando recetas con harina de garbanzo descubrí lo que era la fainá. Si tú tampoco la conocías, o la conoces y quieres aprender a prepararla, te recomiendo seguir leyendo.

Sabéis que las masas en general no son mi especialidad, pero la fainá es una de esas recetas fáciles por excelencia, no es como preparar pan como pensé yo en un principio.

Ingredientes (para un molde de 24 cm de diámetro)

  • 220 gr de harina de garbanzo
  • 550 gr de agua
  • 55 gr de aceite de oliva
  • una cucharadita de sal
  • pimienta (opcional)

También podéis probar a echarle especias a vuestro gusto para darle más sabor a la fainá.


Preparación de la fainá

1. Ponemos todos los ingredientes de la fainá en un bol y los mezclamos con unas varillas.

2. Metemos el bol a la nevera y dejamos reposar un par de horas.

3. Ponemos a calentar el horno a 200ºC. Engrasamos el molde con un poco de aceite de oliva y lo metemos al horno vacío un par de minutos, para que esté caliente cuando echemos la masa y así se cociné bien.

4. Sacamos la masa de la fainá de la nevera, la removemos un poco y la echamos al molde. Horneamos hasta que veamos la parte de arriba doradita, unos 25 minutos.

Desmoldamos ¡y a disfrutar! La fainá se suele comer caliente, pero fría también está muy buena.

Ya veis que cuando hablo de recetas fáciles no miento 😉

recetas saludables

He leído por ahí que en la zona de Italia de donde proviene este plato, se suele comer acompañando a la pizza. Yo el principal uso que le suelo dar es «a modo de pan», aunque con más protagonismo en la comida. Por ejemplo una buena ensalada a tope de cosas y un par de trocitos de fainá. O también la he tomado algún día en el desayuno con un poco de aguacate por encima.

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