13 Dic Roscón de Reyes francés: Galette des Rois
No sé si os he contado alguna vez que mi madre se crio en Francia. Por eso, cada vez que llega el día de Reyes se va en busca de una pastelería donde hacen el roscón de Reyes francés, la galette des Rois. La verdad es que es un bocado exquisito, y una opción muy guay si os apetece cambiar un poquito de «menú» en el día de Reyes. Y obviamente si leéis la receta y os mola, la podéis preparar cualquier día del año, claro 😛
En resumidas cuentas es un roscón de hojaldre relleno con una crema de almendra llamada frangipane (acabo de descubrir que se llama «franchipán» en español). Como vi que la receta era tan fácilmente veganizable, hice el roscón vegano, y no varía en nada el resultado 🙂
Veréis que la receta es un poco larga, pero de verdad que es fácil. Es solo que os lo he querido explicar muy bien con todos los truquis que he ido aprendiendo en mis intentos, para que no tengáis problemas. El relleno se hace en un pis pas y con que os leáis con atención toda la parte del montaje del hojaldre, veréis que no tiene misterio.
Ingredientes
- 2 masas de hojaldre redondas
Relleno
- 360 gr de leche de almendra
- 4 cucharadas de maicena (33 gr)
- unas gotitas de aroma de vainilla
- 240 gr de almendra molida
- 110 gr de margarina
- 100 gr de eritritol*
Montaje/acabado
- para «pegar» ambas masas por los bordes: una cucharada de mermelada + un poco de agua
- para pintar el roscón: aceite mezclado con leche vegetal
- almíbar: 2 cucharadas de agua hirviendo + una cucharada de panela
*Sobre el endulzante: yo he usado un edulcorante llamado eritritol, que lo está petando por su gran similitud con el azúcar en todos los sentidos y al parecer es de las opciones «menos malas» dentro de los edulcorantes. Podéis sustituirlo por la misma cantidad de azúcar.
La leche de almendras que yo compré iba endulzada, por lo que si usáis una leche que no vaya endulzada, os recomiendo añadir un poco más de edulcorante o azúcar al relleno.
Preparación del roscón de Reyes francés
1. Empezamos con el relleno: mezclamos la margarina (yo le doy un tin al microondas, para ablandarla sin que llegue a estar líquida) con la almendra molida y el eritritol.
Por otra parte, ponemos en un cazo la leche de almendras con la maicena y el aroma de vainilla. Ponemos a fuego medio-alto hasta que rompa a hervir, removiendo constantemente con las varillas para eliminar todos los grumos y evitar que se nos pegue.
Cuando hierva, retiramos del fuego, añadimos la mezcla de almendra y removemos bien hasta obtener una crema homogénea. Dejamos que enfríe un poco y espese.
2. Y pasamos al montaje: extendemos una de las masas de hojaldre sobre un trozo de papel de hornear (el que suele llevar). Ponemos en el centro el relleno, dejando un borde de un par de dedos de ancho.
A continuación, pincelamos este borde con un poco de mermelada (de la que sea, no le va a dar sabor) mezclada con un poco de agua tibia. Esto facilitará que se peguen ambas masas.
La masa de arriba tiene que ser ligeramente más grande para que cubra bien todo. Por tanto, le daremos un toque de rodillo. O si no tenéis, una botella lisa o cualquier sustituto que se os ocurra 😉
Ahora ya sí, la colocamos encima, ajustándola al máximo y evitando que se quede aire en el interior. Apretamos ligeramente los bordes para que se peguen, pero sin presionar demasiado.
Para que el borde quede perfecto, recortamos la parte más exterior con un cortapizzas, para que ambos círculos casen a la perfección.
3. A continuación pasamos a hacer la decoración tradicional en forma de sol, para lo que haremos unas líneas como las que veis con un cuchillo romo o con la parte de atrás, con cuidado de no cortar el hojaldre. En mi caso debí marcar demasiado poco las líneas porque luego al hornear se difuminaron bastante.
Para acabar con la decoración, remetemos un poco el cuchillo vertical al final de cada una de las líneas que hemos hecho, para que quede el borde como festoneado.
4. Pincelamos nuestro roscón de Reyes francés con una mezcla de aceite y leche vegetal, principalmente en la parte central, ya que si empapamos el borde corremos el riesgo de que se peguen las capas y suba menos el hojaldre.
También haremos unos cinco o seis agujeritos pequeños repartidos para que suba todo por igual.
5. Y lo metemos al horno (ya caliente) a 210 grados durante 20 minutos aproximadamente (cada horno es un munto).
6. Preparamos el almíbar con dos cucharadas de agua hirviendo y una de panela y así, cuando el roscón haya subido y tenga colorcito, lo sacaremos, lo pintaremos y lo meteremos al horno cinco minutos más. Así conseguimos un acabado más brillante.
¡Y roscón de Reyes francés listo! Calentito es lo más. Suponiendo que no os comáis todo de una sentada, os recomiendo que cada vez que os comáis un trozo le deis un toque al microondas.
¿Conocíais esta receta francesa? Si os animáis a preparar vuestro propio roscón de Reyes francés y a subir una foto a redes, me podéis etiquetar o usar el hashtag #verdequetecomoverde ¡que me encantará saber qué os ha parecido!
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